La familia es un sistema con una red de relaciones, un contexto natural, para crecer y recibir auxilio, un sistema vivo que intercambia información interna y externa donde las fluctuaciones son seguidas por una respuesta (Minuchin).
La familia atraviesa por diferentes etapas o ciclos de vida al través del tiempo, desde su formación hasta su disolución (Rubinstein).
La enfermedad por coronavirus, producida por el virus SARS-COV-2, identificada por vez primera en 2019 en la ciudad de Wuhan en China, reconocida como pandemia el 11 marzo 2020 (OMS), fue la noticia que generó el pánico sobre las familias, una gran incertidumbre y surgimiento de interrogantes, dudas y temores.
La pandemia de COVID-19 ha generado reacciones emocionales dentro del sistema familiar según ciclo vital que se encuentre la familia.
En la primera etapa del ciclo vital familiar que es el noviazgo o elección de pareja, es la etapa del cortejo esta puede entonces verse afectada por las medidas de distanciamiento físico, no hay cines, parques, restaurantes donde acudir la joven pareja.
En la segunda etapa o familia en expansión, es la espera del primer hijo, vamos a encontrar una mujer embarazada y con gran incertidumbre sobre esta enfermedad, los posibles riesgos del embarazo, los chequeos médicos, tener que visitar el hospital periódicamente, si se le presenta el parto en medio de la problemática de la pandemia, si se podrían producir mal formaciones, la pareja muestra una preocupación, dudas sobre el cuidado del recién nacido y la separación de familiares y amigos.
En la etapa, familia con hijos pequeños o preescolares, aquí la familia enfrenta la problemática de los niños dentro de casa sin diversión sin paseos ni escuela, los niños no entienden lo que está pasando ni porqué. Los padres al cuidado de ellos y con responsabilidad laboral dentro o fuera de casa.
La etapa familia con hijos escolares, aquí los padres tienen que ser padres y maestros pues los niños tienen la escuela en casa y los tutores son los padres, muchos niños no se adaptan al estilo de clases en línea o TV. y los padres se sobrecargan, además deben dar respuestas a sus preguntas.
En la etapa familia con hijos adolescentes, existen los enfrentamientos de padres e hijos de forma normativa, ahora con el tener que estar todos en casa y entendiendo que el adolescente es más unido a sus pares que a sus padres, las crisis familiares se acentúan.
La familia con hijos adultos, en esta etapa cada hijo es independiente con entradas y salidas libremente, con las medidas, se ven obligados a estar en casa, no hay eventos sociales ni actividades fuera de casa por lo que la rutina puede generar crisis familiares.
En las familias ancianas y si están en el síndrome de nido vacío, existe la problemática de que los ancianos están dentro del grupo de los más vulnerables y la prohibición de visitas de hijos y nietos puede llevar al anciano a crisis de ansiedad, tristeza y abandono de tratamientos de rutina.