35 años después del descubrimiento del VIH

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Dra. Rita Rojas, Médico infectóloga. Coordinadora del Servicio de Infectología de la Unidad de Medicina Interna del Hospital General de la Plaza de la Salud.
Un poco de historia. Una extraña condición creó inquietud en los años 80 
 

El programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (Onusida) ha escogido, para conmemorar el Día Internacional del VIH/SIDA (1 de diciembre), el lema “Las comunidades marcan la diferencia”, evocando el papel que tenemos todos en combatir la enfermedad.

Una extraña condición creó inquietud a inicios de la década de 1980 en la ciudad de Nueva York, en San Francisco y en Los Ángeles, en cuatro grupos de personas: homosexuales, hemofílicos, heroinómanos, y en quienes habían llegado de Haití a los Estados Unidos. Se les llamó “el Club de las 4H”.

En ellos se describió se describió un aumento poco usual de casos de sarcoma de Kaposi y de neumonía por Pneumocystis carinii. Años más tarde se identificó el VIH como el causante y se estigmatizó a estos grupos vulnerables

Las cosas han cambiado mucho desde hace más de 19 años que empecé mi formación en Medicina Interna y en Infectología. He atendido a muchos afectados y sé que se puede vivir con VIH.

Conozco personas que tienen más de 20 años de diagnosticadas, que no siempre han contado con muchos recursos económicos, que junto con su condición de VIH han padecido distintas enfermedades como tuberculosis, linfoma, toxoplasmosis, entre otras y las han superado incluso en casos en los que han recibido quimioterapia. Soy testigo de las buenas noticias en lo que se refiere a la expectativa de vida: a finales de los años 80 una persona de 20 años con un diagnóstico de VIH/SIDA en una etapa avanzada tenía una expectativa de vida de 1 o 2 años, mientras en la actualidad, la expectativa es casi la de una persona sin la condición, gracias a la terapia antirretroviral.

Los medicamentos han ido evolucionando en números, cantidades de combinaciones, clases, forma de administración…

Al inicio se suministraba la Zidovudina (AZT), que fue el primer fármaco aprobado; luego se hacían combinaciones de dos, después de tres (Trizivir), se interrumpía la terapia (“holiday therapy”), después cuatro y finalmente tenemos varios años suministrando combinaciones de tres. La combinación de tres en una pastilla fue popularizada por Magic Johnson, un conocido miembro del Pabellón de la Fama de Baloncesto quien divulgó en 1991 que padecía de VIH, y hasta hoy sigue siendo un activista de los derechos de quienes padecen su misma condición.

Se ha evolucionado de regímenes de 6 a 20 pastillas, al “régimen simplificado en una tableta”, en el que se suple una combinación de tres tipos de medicamentos en una sola pastilla. El suministro de ARV pasó de necesitar refrigeración o restricciones alimentarias a no tener ninguna y a ser gratuitos.

A nivel global se desarrollan estrategias como la 90-90-90 donde se busca que el 90 % de las personas que viven con VIH/SIDA sepan su diagnóstico, 90 % estén recibiendo medicamentos ARV y 90 % estén con cargas virales suprimidas.

Lamentablemente, según Onusida, en 2018 solo el 79 % de la población mundial sabía su condición y entre las personas que conocían su estado, solo el 78 % tuvo acceso al tratamiento. En el Caribe solo el 55 % está tomando medicamento, y de esos, solo el 53 % esta viralmente suprimido.

Estrategia profilaxis preexposición sexual

Consiste en administrar medicamentos antiretrovirales (Tenofovir/ Entricitabina, nombre comercial Truvada) previo a una relación sexual en personas de alto riesgo (trabajadores sexuales, hombres que tienen sexo con otros hombres, transgénero, parejas serodiscordantes (uno es positivo para el VIH y la pareja no).

La PrEP proporciona un alto nivel de protección frente al VIH pero no protege contra otras infecciones de transmisión sexual (sífilis, VPH, gonorrea…) y se debe utilizar en combinación con el uso de preservativos.

Otra recomendación se refiere a la práctica de la circuncisión, que ha demostrado ser un factor protector para las distintas ITS en especial el VIH, por lo que es altamente recomendada.

Existen dos modalidades de prescripción, que son “a demanda”, que se recomienda cuando la persona tiene sexo casual, pero programado (entre 2 a 24 h previo a la relación, el día del acto sexual y el día siguiente); o “fija”, que consiste en recibir tratamiento todos los días.

Tenofovir/ Entricitabina se usan como terapia ARV junto a otros medicamentos desde hace varios años, pero a largo plazo el uso de estos medicamentos puede afectar el riñón y el hueso.

La PrEP debe ser supervisada por un médico que acompañe a personas con VIH, debido a que previo al inicio hay que corroborar que la persona no esté ya afectada o que padezca de otras ITS u otras infecciones como la hepatitis tipo B o C.

A pesar de que en las dos estrategias, la profilaxis pre exposición sexual (PrEP) o la post exposición sexual o laboral se utilizan medicamentos ARV no se administran de la misma forma ni por el mismo tiempo.

La profilaxis post exposición al virus puede ser por accidente laboral, violación sexual, o sexo no protegido, y el tratamiento se ofrece por 30 días con combinaciones de tres medicamentos, tomando en cuenta el tipo de accidente, el inóculo, el estado serológico del paciente con quien aconteció, si es conocido. En cambio, la PrEP solo usa combinaciones de dos medicamentos.

No todos los países llevan en sus programas la estrategia PrEP. La República Dominicana sí lo hace, por lo que es importante que un infectólogo pueda ofrecer la información sobre dónde conseguir, ya sea de forma pública o privada, los medicamentos.

Además, se requiere revisión periódica para descartar una infección aguda por el VIH, porque la estrategia de tratamiento cambiaría inmediatamente.

VIH/SIDA en el mundo y en la República Dominicana

Según las cifras de Onusida existen en el mundo alrededor de 37.9 millones de personas afectadas, de las cuales 14.6 millones todavía no están recibiendo ARV. Cada semana, alrededor de 6200 mujeres jóvenes de entre 15 y 24 años contraen la infección por el VIH.

Del año 2005 al 2018, las muertes relacionadas al sida han disminuido en un 55 % debido al tratamiento antirretroviral, que trata de ser universal.

1200 personas murieron en el 2018 por causa del sida en el país . La prevalencia en RD es de 0.9 % de la población y equivale a 70 000 personas afectadas.

En la República Dominicana contamos con 76 unidades para la atención de las personas que viven con VIH/sida distribuidas por todo el país y las pruebas de laboratorios son asumidas por el Estado para que todos tengan acceso a la atención.
Se requiere que el pueblo dominicano, los pacientes y los proveedores de salud entendamos que “la comunidad marca la diferencia” y que es un asunto de todos si queremos erradicar la enfermedad para el 2030.

A tal fin, deberíamos incentivar el uso de preservativos, PrEP en comunidades vulnerables e indicar más pruebas de VIH con el fin de diagnosticar más temprano para que disminuya la transmisión en nuestro país.

 

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